Y todos los árboles del campo sabrán que yo soy el Señor. Yo derribo al árbol orgulloso y altivo...Yo, el Señor he hablado, y lo haré. Ezequiel 17:24
Éste árbol de Cotoperí que ustedes ven aquí representaba para Montalbán (En Carabobo-Venezuela) un ejemplo de laboriosidad de un pueblo agrícola ...lo sentían como un ejemplo de resistencia y vitalidad.
En días pasados el árbol cayó de manera estrepitosa, gracias a Dios que nadie estaba cerca, cayó a pesar de que hace muchos años atrás se había resquebrajado y le habían colocado cadenas para que se sostuviera, finalmente su caída era inevitable. Hice años atras un micro de la plaza donde se encontraba, de hecho esa foto es del micro, aqui les dejo el enlace a mi canal de youtube donde puedes verlo https://youtu.be/1Yok_Ljl2Y4.
Bien Dios usó este evento para hablar a mi corazón y enseñarme algo. En Isaías 40:30b en la versión DHH dice ; "...hasta los más fuertes llegan a caer." La Biblia nos enseña que muchas veces el hombre (ser humano) es comparado con un árbol :
- Una persona es como el árbol de un campo... Dt.20:19
- Porque así como los días de un árbol serian los dias de mi pueblo. Is 65:22
- El será como un árbol plantado cerca del agua. Jeremías 17:8
El mismo Jesús utilizó muchas veces esta comparación entre los árboles y los hombres Mateo 7: 16-24 - Lucas 6:44. Hago todas estas referencia para ilustrar un principio bíblico, "la soberbia " recordemos que el Reino de los Cielos se rige por principios, éste árbol muy bien "plantado", anclado a la tierra con un aparente mecanismo de supervivencia más de 240 años de historia, simplemente cayó.
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Lo que quedó del árbol Cotoperí |
Muchas veces nos volvemos soberbios y orgullosos, sostenidos no por nuestras raíces sino por nuestra apariencia (hojas), actitudes imponentes sobre otros, que lo que hacen es alejarnos de Dios y de los seres que amamos; lastimamos el corazón de Dios, el de nuestros seres queridos y creo fielmente que el nuestro también, porque no fuimos creados ní para ser soberbios ni tampoco independientes y ese es un principio satánico totalmente opuesto al principio bíblico de humildad y dependencia hacia nuestro Hacedor. A muchos se les nota las cadenas que los" sostienen" tal como le sucedió a éste árbol, pero que no lograron sostenerlo por mucho tiempo, igual se cayó. La palabra es clara, no solo Dios mira de lejos al orgulloso y altivo, como esperando tal vez que se arrepienta... sino también que lo derriba... que por lo general la caída es estrepitosa.
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